MUSEO DE SANTA MARÍA - BECERRIL DE CAMPOS
 
 
Principal
Autores
Obras
Temas
El artista antiguo: pasos de un oficio
El patrimonio artístico de Becerril
Arte popular y devociones
La quiebra del Antiguo Régimen y su incidencia en el patrimonio
La Iglesia de Santa María
Liturgia y culto
Retablo de Nuestra Señora la Antigua
La Platería
La capilla y el patrono
El púlpito
Armaduras de madera
Alejo de Vahía
Pedro de Berruguete
Retablos
Salas
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LITURGIA Y CULTO

El culto divino, rendido en el edificio del templo, necesita una serie de elementos físicos que le sirvan de instrumentos, a la par que de ornato y estimulo a la piedad popular, que precisa afianzar la fe con el apoyo de lo visible. La iglesia se enriquece as¡ con obras de arte que en su origen tuvieron esencialmente una función de culto.

A este afán obedece la ornamentación de pintura y escultura, conjuntadas generalmente en el retablo, tan característico de las iglesias españolas, y que tienen por misión ambientar y embellecer, con una función cultual y pastoral a la vez, sirviendo de escenario para las ceremonias de culto y convirtiéndose en un catecismo visible para los fieles.

Con su origen en la palabra "retrotabulum", o tabla que se pone detrás del altar, a partir del siglo XI será común la colocación del retablo con el vaso "píxide" conteniendo el cuerpo del Señor, creciendo a partir del siglo XIV en riqueza y espectacularidad.

El retablo llegará a su plenitud en la segunda mitad del siglo XV, convirtiéndose a partir del siglo XVI y especialmente en el Barroco, en grandiosas máquinas arquitectónicas en cuya ejecución colaboran una pléyade de artistas.

El retablo será un elemento tan esencial que no se hará altar sin retablo, confundiéndose incluso ambas palabras.

Las iglesias españolas contaban con numerosos retablos, costeados unos -esencialmente- por la parroquia, y otros por las cofradías, aumentados además por los realizados para las capillas de las fundaciones familiares, rivalizando los distintos mecenas en encargar los mejores retablos.

Debido a su esplendor pasado y a la abundancia de parroquias, Castilla y León conserva el mayor número de retablos de España, los cuales contribuyen de manera esencial a la riqueza del patrimonio artístico general de la región, brillando la provincia de Palencia de manera especial en este panorama.

junto al retablo, que combina las artes más "nobles" -pintura y escultura-, forman parte del patrimonio artístico de los templos la ropa litúrgica, con sus ricas variantes de casullas, dalmáticas, paños de altar, etc, adecuados a cada tipo de ceremonia y a los distintos tiempos litúrgicos -adviento, cuaresma, epifanía, etc- y a la platería, ampliamente representada en este museo con piezas destinadas a satisfacer los diversos momentos del culto: bautismo, eucaristía, extremaunción, procesiones, entierros, etc.

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Última actualización: FEBRERO de 2002